lunes, 27 de octubre de 2008

A CONTRACOCHE


Jean Michael Jarre - Oxygene III.mp3



La cara arañada por el viento y otros surcos,
se quedó de perfil con sus guantes sin dedos.
La muerte arrastra su hambruna por la tierra de su carne
para cerrarle la boca, garabato sin vida,
del cuerpo soterrado que abre sus ojos de arena.

A ti que la bruma de alcohol te puso ruedas,
que la coca te da un cielo de flores del camino.
Francachela de un corazón de adrenalina,
revoloteo de delirios zambullidos en alcohol,
se te acabaron las “rayas”, “birras” y “pibitas” al costado,
ahora tendrás hielos, llantos y amapolas.
Acabó tu futuro soplado en duro viento
excremento y cuerpo de estatua rota.
Confiado en tu aire como ave en su vuelo
ahí estás como un duende nublado entre llamas
con tus segundos asesinos y arrugas de chatarra.

Ya tienes tu brindis de gasolina
y en su copa te bebes tu sudario.
Las abejas de la muerte te dan su color cera.
Castañeándote los dientes sobre la mala sangre,
se apaga tu mirada con cadencia de reloj en tus párpados
entre los ayes de dolor del mal encuentro cobarde.

Como al amor y al baño la muerte te llama desnudo.
¡Tú te lo has buscado en mala hora!
El encanto de tu boca, fruta fresca,
queda en llanto latido en tu calavera.
Ya estás como querías, como una cruz en la cuneta
entre los juncos durmientes y el chapoteo del barro
como tumba de extravío y amnesia.

Pero yo seré un voraz hurón por tus rincones
con la sangre encendida en los perros de mis ojos
mientras me acodo en la barra del recuerdo
para beber su agriado vino.
La indiferencia es la moneda que paga este dolor
cuando mi grito de cristal te abre las heridas.

R.I.P. A los desgraciados que se han ido atropellados,
dejando hijos y familia.
A ti que te den, que te den,
que te den los tres mil euros apostados en la mierda.


Adrenalina, tío, adrenalina para mi cuerpo.
Roooom, rooooom, roooom,
acelerador, acelerador a tope que acojone.
Estás como una moto en la autopista a contracoche.
Que se aparten los tíos, que se coman su miedo.
Piiiiiiii… piiiiiii… piiiiiii…booooo… booooo… booooo…
Joder qué cerca estuvo,
tengo el nudo de la noche en mi garganta,
la leche que esos catetos se han dado,
son unos cagados comidos por el miedo.

Ya tengo la mitad de lo apostado
haciéndome tilín en el talego.
Noche de pasión y espuma,
me duele un gemido en la entrepierna…
tío, ¡me estoy corriendo!-.

-¡ No, nooooo, nooooooooo,
ese hijo puta se va a incrustar conmigo!
¡Cabroooooón, ya me lo has hecho!-
Piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii……………………….

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