DavidKersh_Wonderful..>
La niña se fue a la mar
con tres ligeritas prendas,
llevando por alazán
su máquina de dos ruedas.
Arde el sol en las espaldas
como un estoque en la fiesta,
su hebra de fino acero
hasta los tuétanos quema.
Juega el mar con su mantilla
resbalada por la arena,
bordada de caracolas
y del cristal de la piedra..
Tiembla la piel con el agua,
hierro de fragua en su templa,
cálida de luz tostada
quita al cobre su canela.
Una mano se distrae
hacia otra que la espera,
las piernas palpan el fondo
y el agua su sexo apresa.
Y la esplendorosa ola
muerde canina su presa,
con sus peces voladores
su nalga, a la carta, besa.
La bella y la mar son una,
loca la piel con él juega
como si fuera un arcángel
con alas de agua despierta.
Un cascabel ha sonado,
de risas, el mar se peina,
danza hecha velos el agua
cuando emerge su cabeza.
El labio amanece al diente
y el diente da su realeza,
de marfiles engastados
la boca es caja de muestra.
Un diamante cada gota,
abanicos las melenas,
las perlas ruedan la piel,
la frente calza una estrella.
Y se cala entre la ola,
y de deslíe con ella,
se mecen onda con onda
las olas y su melena.
Ya esta la niña en el agua,
la mar en brazos la lleva,
el sol taladra las aguas,
ha nacido una sirena.
Pepe Martín
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