el árbol no da aceitunas.
¿Qué han hecho de los olivos que dejaron de estar cuerdos?
¿Qué han hecho de los olivos que dejaron de estar cuerdos?
Olivos de rumorosa Estrella y rebaños de Luna.
Huerto de Jetsemaní, campos de Líbano y Palestina,
vuestro cielo daba antes aves como suspiros
y ahora da gritos de terror por otras aves
que aúllan como lobos hambrientos.
Olivos, eran los brotes sagrados de una tierra caliente,
Olivos, eran los brotes sagrados de una tierra caliente,
ahora parecen naves zozobrantes y a la deriva.
Se ofrendaban a los dioses,
con él se ungía al héroe y al atleta
al padre muerto y al sabio,
de él comían tanto el pobre como el rico.
Pero ahora les escarnan sus raíces a fuego,
Pero ahora les escarnan sus raíces a fuego,
llega su sangre a las ciudades
y muere el inocente como paloma depredada.
¿Dónde queda la Paz de los vivos?
¿Dónde queda la Paz de los vivos?
¿Dónde puso Dios al fuego límites?
¿Dónde el desconsuelo acaba?
¿Dónde el sacrilegio empieza?
¿Qué han hecho de los olivos que dejaron de estar cuerdos?
Oh, niños sin rostro deambulando por los quicios de la tierra.
Oh muerte, maldito jinete que cabalgas los desiertos,
tu sangre se te tornó salamandra y tu ira es su vómito de metralla.
¡Tengo miedo a los hombres cuando caminan por los extremos!
Cuando la cabra trisca y rumia el ramón del olivo,
Cuando la cabra trisca y rumia el ramón del olivo,
el árbol deja de dar aceitunas.
Pepe Martín
Pepe Martín
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